De acuerdo con un informe muy escueto de la Policía
Municipal de Puerto Vallarta, la mañana del jueves fueron hallados dos
cadáveres a la altura del mirador de la playa Palmares, muy pegada al Paredón
Colorado y cerca del hotel Garza Blanca. Se trata de un hombre y una mujer que
estaban atados de pies y manos y con huellas de haber sido asesinados presuntamente
en el mismo lugar.
El parte policiaco dice textualmente lo siguiente:
"Siendo las 07:40 horas reportó BASE CARE que a la altura del
mirador de la playa Palmares, en Mismaloya, antes de llegar a Garza Blanca,
sobre dicha playa había dos personas amarras de pies y manos, boca abajo, al
arribar los agentes en la unidad PV-158, al mando del Tercer Oficial José Ángel
Raygoza Tarango, manifestando que el reporte era afirmativo, informando que una
pareja, al parecer, ya habían fallecidos los cuales tenían atadas las manos y
la cabeza de ambos se encontraba machacada con una piedra, por lo que se les
informó al Ministerio Público, arribado Abel Ramírez, de la Policía Investigadora
arribó Gerardo Orduño Ríos, la SEMEFO María del Carmen Ramírez Cano, la Policía
del Estado la PR-316 al mando del Segundo Oficial, Martin Carlos Colima. Los
occisos no fueron identificados por lo que quedaron como “NN” masculino de 35 a
40 años, aproximadamente, vestía camisa a cuadros con rayas, rojo, blanco y
azul, pantalón de mezclilla oscuro, cinto de vestir color negro, pelo corto,
1.65 metros de estatura, robusto, moreno claro, la “NN” femenina era morena
clara, 1.70 metros de estatura, de aproximadamente 25 a 30 años de edad, vestía
pantalón de mezclilla color azul, blusa blanca con negro tipo cebra, zapatillas
color gris con tacón de aguja, pelo castaño quebrado, los cuales fueron atados
de pies y manos con un cable de la luz en color blanco y en la boca las tenían
tapadas con una camiseta".
IDENTIFICAN A LAS
VICTIMAS
Ya por la tarde, las víctimas fueron identificadas por sus
familiares, eran vecinos de la delegación Ixtapa.
Una nota periodística de la reportera Verónica Díaz del
periódico El Sol Siempre Libres, dice lo siguiente:
Un ingeniero y su
novia estilista fueron encontrados asesinados a pedradas y amarrados en la
playa Palmares, en donde se presume, fueron llevados aún con vida y ahí los
ultimaron durante la madrugada, el móvil podría tener tintes pasionales.
El hallazgo lo realizó un empleado del ayuntamiento que ayer
a eso de las siete de la mañana se encontraba realizando limpieza en las playas
de la zona sur de la ciudad y al llegar al mirador de la playa en mención,
grande fue su asombro, al ver que sobre la arena -entre las piedras-, se
encontraban los cuerpos de dos personas amarradas de pies y manos, sobre sus
espaldas tenían una enorme roca.
Inmediatamente el servidor público reportó los hechos a las
autoridades y al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal, Estatal y
Federal para verificar el reporte, mismo que al ser confirmado se dedicaron a
acordonar la zona para evitar que se contaminara la escena del crimen, en tanto
llegaban el Ministerio Público y personal de Servicios Periciales, lo cual
ocurrió tres horas después.
En punto de las diez de la mañana, las diligencias por parte
del fiscal Abel Ramírez y la perito en criminalística Carmen Ramírez Cano,
dieron inicio con la revisión de las personas, las cuales se encontraba
acostadas boca abajo, con sus pies flexionados hacia arriba y atados de los
tobillos con un cable blanco, con el cual también tenían amarradas las manos.
El hombre vestía una camisa cuadrada en colores rojo, azul
marino y blanco, pantalón de mezclilla, botas de gamuza en color café, no
portaba identificaciones, solamente las llaves de un vehículo y las de su
vivienda posiblemente; como lesiones se le apreciaban severos golpes y heridas
en cráneo producidas por golpes con piedras.
En cuando a la joven, traía un pantalón de mezclilla en
color azul, blusa rallada blanco con negro y estaba descalza, aunque a un
costado sobre la arena se encontraban sus zapatillas en color plata y
presentaba el cráneo completamente destrozado; tampoco presentaba
identificación alguna.
Al ser desamarrados y volteados para revisarlos, se pudo
apreciar que ambos tenían una mordaza en sus bocas con una playera en color
blanco; en el caso de la mujer presentaba una herida que iba de la boca hacia
la mejilla y la mitad de la encía superior se le salió con todo y dientes,
quedándole sobre la mordaza
Junto a los cadáveres se apreciaban dos vasos desechables de
litro que contenían lo que al parecer era michelada, por lo que en un principio
se creyó que ellos se encontraban ahí en la playa disfrutando de una velada
cuando fueron sorprendidos por sus asesinos (al menos dos); sin embargo al
revisar el calzado del hombre, se apreciaba que no presentaba ni una pica de
arena lo mismo que los pies descalzos de la joven que estaban completamente
limpios, lo que hace presumir que estos fueron llevados a ese sitio aun con
vida y los bajaron cargando, sujetados del mismo cable con el que estaban
amarrados y una vez que los tiraron en la arena los golpearon de manera brutal
con las piedras, una de las cuales al final se las dejaron caer quedado en
medio de ambos cuerpos.
Al concluir las pesquisas los cadáveres fueron trasladados
al anfiteatro forense en calidad de desconocidos para que les realizaran la
necropsia de ley.
Ya por la tarde, la familia de las víctimas acudieron al
Ministerio Público a efecto de reclamar los restos de quienes identificaron con
los nombres de Joel Flores Becerril, de 30 años de edad, vecino de la calle
Faisán número 207 en fraccionamiento Tamarindos, de la delegación de Ixtapa, de
profesión ingeniero; tenía una camioneta Nissan, tipo Pathfinder, color plata,
modelo 2001, la cual no aparece. La mujer respondía al nombre de Astrid
Elizabeth Ramírez Langarica, de 26 años de edad, de oficio estilista, con
domicilio en la calle Bugamibilia número 146 de la colonia Jardines en la misma
delegación.
Durante su declaración los familiares de ambas víctimas por
separado dijeron desconocer los motivos por los que fueron asesinados, pues se
dedicaban a trabajar de manera honesta, por lo que sospechan que podría
tratarse de una cuestión pasional, sin embargo las pesquisas apenas empiezan y
será hasta que concluyan cuando se sepa cuál fue el móvil.
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