jueves, 27 de octubre de 2016

"LEVANTAN" A DOS EN PUERTO VALLARTA, LES DAN UNA GOLPIZA Y LOS TIRAN; UNO DE ELLOS MURIO



Dos sujetos habrían sido “levantados” en algún lugar de Puerto Vallarta, los torturaron y después los aventaron a la vía pública cerca del Hospital Regional, por la calle Dinamarca. Uno de ellos murió a causa de la fuerte golpiza que recibió, mientras que otro quedó gravemente herido y fue trasladado al mismo nosocomio por donde lo tiraron.

Se trata de Edgar Asunción HN de 29 años y José Eduardo HN de 28 años de edad, los hombres que fueron encontrados este jueves a las 0:30 horas severamente golpeados y tirados sobre una cancha deportiva que está por el Hospital Regional, en la colonia Loma Bonita.

Fue un taxista el que reportó que sobre las calles Dinamarca y Guerrero estaban dos personas tiradas y al parecer inconscientes, por lo que hasta el lugar se trasladaron policías municipales y socorristas de Puerto Vallarta para verificar esta información.

Al llegar al sitio, sobre la maleza, estaban dos masculinos, uno ya sin vida y otro todavía con signos vitales. Este último fue trasladado de urgencia al Hospital Regional para ser atendido, ya que presentaba múltiples golpes, sobre todo en la parte de los glúteos, lo que significa que lo sometieron a una intensa tortura.

El otro individuo, no resistió la golpiza y murió. No se sabe si ya estaba muerto al momento de que lo aventaron a la vía pública, o si murió en el lugar.

La Fiscalía Regional investiga si estas personas tienen o tenían antecedentes penales, si alguien les quería hacer daño, o si se dedicaban a algo ilícito; o el por qué fueron aparentemente “levantados”, golpeados y después arrojados en ese sitio.



miércoles, 26 de octubre de 2016

¡YA BASTA SEÑOR GOBERNADOR!, ATIENDA EL CASO DEL PERSONAL CUBRE-INCIDENCIAS DEL HOSPITAL REGIONAL DE PUERTO VALLARTA


Por Jorge Olmos Contreras

O el gobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval es un cínico que no le importa ya nada, o de plano tiene enormes compromisos con su ex subsecretario de finanzas, Salvador González Reséndiz. De otra manera, no se entiende cómo ha permitido que crezca el problema de los Cubre-Incidencias del Hospital Regional de Puerto Vallarta y deje abandonados a su suerte a más de 100 empleados, a quienes no les han pagado más de dos meses de sueldo, a quienes les deben el aguinaldo del año 2015 y a quienes ni siquiera les cubren sus primas vacacionales, y mucho menos cuentan con seguro de vida, pese a estar expuestos a cualquier enfermedad infecto contagiosa.

Y mencionamos al ex alcalde vallartense, Salvador González Reséndiz, mejor conocido como Chavita, porque fue él quien recomendó como jefa administrativa del Hospital Regional a una tipa prepotente, majadera, grosera, que no tiene la más mínima sensibilidad para tratar los asuntos apremiantes de los trabajadores del nosocomio.

Nos referimos a Lorena Hernández Becerra, una mujer sin escrúpulos y de escasos valores, que fue metida por la fuerza a la administración del Hospital Regional, y que antes había estado en la jefatura del Rastro Municipal, precisamente en el gobierno de Chavita, donde también hizo y deshizo, gracias al apoyo de los hermanos González Reséndiz.

Es lamentable que el gobernador no voltee los ojos a Puerto Vallarta, que no tenga una pizca de sensibilidad política para solucionar este asunto que, no es otra cosa que los derechos de los médicos y enfermeras cubre-incidencias, personal que sacrifica horas y días para atender los servicios del nosocomio; que se la juegan todas las noches y todos los días para proporcionar el servicio de emergencia a muchos pacientes, y cuyo esfuerzo no es remunerado ni reconocido, debido a que Lorena Hernández Becerra se comporta como un capataz que exige trabajo sin pago alguno.

Jorge Aristóteles parece flotar en las nubes que le da el confort de ser gobernador; cree que al viajar al extranjero está poniendo en alto el nombre de Jalisco. No se detiene, ni por un momento, a verificar lo que está sucediendo con los servicios de salud, pues, así como hay un desdén ofensivo a las exigencias del personal del Hospital Civil de Guadalajara, así lo hay con los trabajadores del Hospital Regional de Vallarta.

El poder muchas veces vuelve invidentes a los políticos, no ven lo que no quieren ver. Desdeñan cualquier asunto, no les importa si alguien tiene para comer hoy o mañana, ellos caminan y se mueven en alfombras de terciopelo, lo demás es pecata minuta.

Es tanta su ceguera, que olvidan que la sociedad de hoy está más atenta a lo que hacen sus gobernantes, y que cuando los niveles de corrupción llegan a un grado que no se pueden ocultar, suceden casos como el del gobernador con licencia de Veracruz por cierto, expulsado ayer del PRI--, Javier Duarte, o el de Sonora, Guillermo Padrés, dos políticos que hoy son una vergüenza para sus partidos y para el país, y a quienes se considera prófugos de la justicia.

Jorge Aristóteles no se ve en el espejo de Javier Duarte ni de Guillermo Padrés, porque su arrogancia y nivel de vida se lo impiden; pero un simple caso como el de los Cubre-Incidencias de Puerto Vallarta, puede ser la punta para desenredar toda una madeja de corrupción, que ni el mismo gobernador podría cubrir con su manto protector para salvar a personas ligadas a Salvador González Reséndiz.

En el caso de Vallarta, ya no puede ser tan negligente señor gobernador, es su deber actuar y corregir lo que está mal. Esta señora que puso su amigo Salvador como administradora del Regional debe irse por salud y la buena convivencia de los trabajadores, que a veces se convierten en verdaderos héroes ante tanta carencia y ante tanta gente hipócrita como Lorena Hernández Becerra.

No es posible que su secretario de salud, Antonio Cruces Mada, presuma un impresionante currículo y sea toda una figura de cera ante los problemas que existen en casos como el del Hospital Regional.

No es posible que ni usted, señor gobernador, ni ningún funcionario, por más mediocre que sea, tengan la voluntad para resolver este conflicto y pongan en riesgo un servicio de primera necesidad como son los de salud, máxime en un hospital como el Regional de Vallarta, que atiende cada semana a miles de personas que llegan de toda la región de la Costa Norte de Jalisco.

Si usted señor gobernador, sigue tolerando estos agravios y permite que se cometan injusticias, como la que sufrió en carne propia el enfermero Cruz Becerra el pasado fin de semana, a quien ya no dejaron trabajar los cómplices de Lorena Hernández léase el director, Raúl Morales Aceves; la usurpadora que se hace pasar como representante sindical, Teresa Rodríguez (gracias a la falta de pantalones de quienes dirigen el sindicato, como Pedro Gutiérrez y el doctor Jesús Lepez) y la nefasta jefa de enfermeras, Alma Rosa Gómez Olivarríay a quien le negaron el acceso al nosocomio, tarde o temprano el brazo de la justicia lo va a alcanzar, pues está siendo también cómplice por omisión.

Para quienes tienen dos meses sin sueldo, sin aguinaldo del año pasado, sin primas vacacionales, debe ser desesperante seguir prestando el servicio de cubre-incidencias en el Hospital Regional; pero más desesperante debe ser, cómo el mismísimo gobernador hace caso omiso a sus llamadas.

Y todavía peor: Que nadie en Puerto Vallarta, ningún regidor, diputado local o federal, tome este asunto como suyo y vaya a las instancias que tenga que ir, para que estas personas puedan vivir y trabajar con dignidad.

¿Quién dice yo?...

A continuación, dejo el texto de una carta que enviaron los cubre-incidencias del Regional a varios medios de comunicación:

A LA OPINIÓN PÚBLICA:

Personal Cubre-Incidencias del Hospital Regional de Puerto Vallarta, externa su inconformidad ante los sucesos ocurridos el día 21 de octubre de 2016.

EXPONEN:

Personal que iniciaba y otros que concluían su jornada laboral en el hospital, así como algunos usuarios de los servicios que brinda el hospital, fueron testigos esta tarde de cómo le fue impedido al enfermero Cruz Becerra B. registrar su ingreso a laborar en el hospital, pues el checador no aceptaba el registro de su entrada y no la aceptaría, ya que según mencionaron, fue instrucción del director Raúl Morales Aceves con la colaboración de la administradora Lorena Hernández B. y la jefa de enfermeras Alma Rosa Gómez O. cesarlo de sus actividades laborales.

Lo anterior responsabilizándole de las recientes publicaciones en los medios de comunicación que exhibían las precarias condiciones en que trabajan:

·         Falta de pago (adeudan meses de salario por días laborados).

·         No cuentan con seguro de atención médica (aun cuando se encuentran expuestos a enfermedades infecto-contagiosas).

·         Adeudan aguinaldo y primas vacacionales (no se ha realizado el pago correspondiente al año 2015).

·         No cuentan con periodo vacacional (ninguno ha disfrutado un solo periodo vacacional correspondiente al año 2016).

·         Violaciones a sus derechos de ascenso (los beneficios de escalafón son otorgados a personas cercanas al personal directivo, afectando a la fecha los derechos de un considerable número de trabajadores).

·         Y otras más.

Por estos motivos, el personal manifiesta FORMAL INCONFORMIDAD y denuncian por este medio las medidas represivas de que son objeto los más de cien trabajadores que no cuentan con representación sindical, ni nadie que dé la cara por ellos y solicitan la intervención de los lectores y de las autoridades competentes para encontrar una solución y la reinstalación del joven enfermero.

¡¡Agradecen su atención!!


domingo, 16 de octubre de 2016

PANDILLEROS DE PUERTO VALLARTA ASESINAN A JOVEN Y DEJAN MAL HERIDO A OTROS TRES



La noche de este domingo 16 de octubre se tiñó de rojo en la colonia Buenos Aires de Puerto Vallarta, todo a causa de una riña entre pandillas que dejó como saldo el de un joven muerto y tres más heridos, quienes fueron trasladados de urgencia a la Cruz Roja y de ahí derivados al Hospital Regional, aunque el más grave sería intervenido en la clínica 42 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Los causantes de estos sangrientos hechos son señalados como dos sujetos a los que apodan “El Crack” y “El Popo”, quienes supuestamente pertenecen a una pandilla que conocen como los de la “San Judas Tadeo” y que tiene su territorio en la misma colonia en donde sucedió la agresión contra otros muchachos de la Buenos Aires.

De acuerdo con los mirones del lugar, los jóvenes que fueron agredidos se divertían campantemente cuando de pronto llegaron “El Popo” y “El Crack” a buscarle bronca a uno de los muchachos de menor edad, quien aceptó pelear a mano limpia contra uno de los busca-pleitos, pero como iba perdiendo la pelea, sacó de entre sus ropas una navaja que hundió en varias ocasiones en la economía corporal del jovencito al que sólo conocen como “Javier”, pero de nombre Enrique García de 23 años de edad.

El cobarde sujeto aprovechó su ira para agredir a todo aquél que se interpusiera en su camino o al que identificara como amigo de “Javier” y o Enrique García, por lo que logró herir con el arma blanca a otros tres muchachos de la Buenos Aires para después huir con rumbo desconocido junto con su otro cómplice.

Las personas, al ver que los muchachos estaban muy heridos, llamaron rápido a la Cruz Roja, por lo que al arribar la ambulancia recogieron con urgencia a los lesionados; sin embargo, Enrique García o “Javier”, por la gravedad de sus heridas, murió en una de las camas de la Benemérita Institución.

Los otros tres heridos fueron atendidos en la misma Cruz Roja, pero un tercero, que presentaba un cuadro crítico y que ponía en riesgo su vida, fue llevado al Hospital Regional, donde por falta de camas sería intervenido quirúrgicamente en la clínica 42 del IMSS.


jueves, 13 de octubre de 2016

COMO SI FUERA EL ÚLTIMO TREN DE SUS VIDAS, GABRIEL IGARTÚA Y LUPITA BAYARDI SE AFERRAN AL “PODER EMPRESARIAL”



Por Jorge Olmos Contreras

Como si se tratara de la última liana que hay en la selva y a la cual necesitan imperiosamente asirse para seguir con vida, los “empresarios” Gabriel Igartúa y Guadalupe Bayardi, brincaron ayer a las dirigencias del Centro Empresarial de Puerto Vallarta y a la Asociación de Expresidentes de Organismos empresariales respectivamente, con el único objetivo de seguir estando en la palestra pública… para bien… o para mal.

Al interior del sector privado, se interpretó este movimiento como una medida desesperada de dos personajes que han arrastrado en Puerto Vallarta la vergüenza de haber sido y el dolor de ya no ser. Se subieron a su último tren, porque quizá en poco tiempo ya no se hable más de ellos, se irán quedando en el olvido y fenecerán poco a poco como figuras públicas.

Gabriel Igartúa es dueño del hotel Las Palmas junto con su hermano José, y hay que reconocer que todavía tiene algo de representatividad; aunque su postura intransigente y su falso protagonismo lo ha orillado a conflictuarse con la mayoría de sus compañeros hoteleros, quienes lo ven como un sujeto caprichoso, que se quedó atrapado en el túnel del tiempo y cuyas ideas son tan arcaicas, que muchos mejor le sacan la vuelta.

Guadalupe Bayardi, a su vez, es un caso lastimoso; vergonzoso en una mujer que pretende hacer creer al sector privado que ella es una importante empresaria del sector restaurantero, cuando ya no lo es. Su mejor tiempo ya pasó y fue hace muchos años, al estar al frente de la Canirac, gracias a que su cuasi delincuente ex marido, Pepe Bejos, era propietario del restaurante Mogambo.

EN LA QUIEBRA

Lupita Bejos –como es más conocida en Vallarta--, está a punto de la quiebra total, su situación económica es tan mala, que pronto va a engrosar la fila de los ciudadanos que vivimos al día y que a veces ni para comer tenemos, por lo que no puede ser representante de ningún organismo empresarial, a menos de que tenga chamba de Relaciones Públicas o de asistente o secretaria de algún presidente de la Iniciativa Privada.

Por eso, llama la atención el movimiento que se registró ayer en el Centro Empresarial –que está afiliado a la Coparmex--, donde un pequeño grupo de empresarios medianos y pequeños, eligieron como su nuevo presidente a Gabriel Igartúa Sánchez, el otrora junior de Don Gabriel Igartúa Méndez, quien falleció ya hace años.

Y es que Gabriel Igartúa saltó de un club prácticamente desconocido –como lo es la Asociación de Expresidentes de Organismo Empresariales (donde sólo cohabitan Lupita Bayardi, Jorge Villanueva, Eva Sánchez y el propio Gabriel)—a la presidencia de la Coparmex Vallarta; mientras que Lupita Bayardi asumió la titularidad del Club de Expresidentes.

Anoche, Gabriel y sus invitados estaban festejando a risa abierta en un salón del hotel Holiday Inn Express, la asunción al poder de los organismos “cúpula” del sector privado, como si en realidad representaran algo importante, como si hubieran llegado al máximo nivel de la IP; pero el festejo era engañoso, porque ellos saben a la perfección que ser presidente de un club de ex presidentes y nada, es lo mismo.

UN PODER IMAGINARIO

Así las cosas, si bien es cierto que la Coparmex tiene cierta importancia en el sector privado de Vallarta, también lo es que nunca se va a equiparar a la prioridad que tiene la Asociación de Hoteles y Moteles; la de los Tiempos Compartidos, o la Asociación de Empresarios de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, por lo que su representatividad es mínima.

Sin embargo, como se trata de un “protagonismo puro”, tanto Gabriel como Lupita tratarán de influir en algunos medios de comunicación para llevar agua a su molino, y no para representar los intereses de estos pequeños y medianos empresarios. El fin es tener una estafeta a la mano para tratar de doblegar a los representantes de otros sectores –públicos o privados—mediante el chantaje y el golpeteo mediático, y así lograr posicionar algunos proyectos que en el pasado han perdido.

Por ejemplo, van a volver a la carga para que el Ayuntamiento les autorice un presupuesto mayor a los 12 millones de pesos (para resolver su situación económica personal), con el pretexto de reactivar el patronato del centro histórico de Puerto Vallarta; o de que les den prebendas y canonjías para poder participar en los festejos de la ciudad.

Por ello, es importante no perder de vista a estos viejos empresarios, sobre todo a Lupita y Gabriel Igartúa, que en el año 2014 fueron reclutados por la hoy regidora Susana Rodríguez, con la intención de sumarlos a la Coordinación Operativa Municipal del Movimiento Ciudadano, pues fue ella quien los llevó al evento donde tomó protesta en ese entonces, Jaime Castillo Copado, en el tráiler park Tacho’s.

UN PROYECTO FRACASADO

Tanto Gabriel como Lupita tomaron protesta, junto con otros muchos ciudadanos, del nuevo comité naranja, pese a que apenas unos meses atrás habían jurado ante sus compañeros de la Asociación de Empresarios de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, que no buscarían estar en algún partido político, y les fallaron.

Al paso de los meses, tanto Gabriel como Lupita se fueron despintando, el color naranja lo estaban mudando –como cuando las serpientes mudan de piel—y de plano lo echaron por el caño en el momento en que el hoy alcalde, Arturo Dávalos Peña, no se dejó chantajear por estos “empresarios”.

El proyecto de Susana Rodríguez de meterlos al presupuesto municipal, fracasó, pese a que su mamá le insistía en que ayudara a la pobre de Lupita Bayardi, pues es su íntima amiga.

En poco tiempo, Jorge Villanueva –el dueño del CMQ—los rescató, atrajo y los metió en el mismo costal en donde cohabitan (siempre para conspirar) con la regidora Rodríguez Mejía, que, siendo parte del Cabildo y del MC, prefirió aliarse con estos viejos mañosos para seguir sus fines torcidos, en donde ponderan el beneficio personal y de grupo, por encima de los intereses del verdadero sector privado, y, por supuesto, de Puerto Vallarta.

…LA VERGÜENZA DE HABER SIDO

Como señalamos antes, Lupita Bayardi ex de Bejos, no tiene la menor representatividad en la Iniciativa Privada, es un cero a la izquierda, no tiene con qué hacerle frente a la mínima contingencia económica, por lo que, por vergüenza debería dejarles el lugar a las nuevas generaciones.

En tanto, Gabriel Igartúa no es el mejor modelo de empresario hotelero en la ciudad, por el contrario, su hotel (Las Palmas) está tan descuidado, que se está cayendo a pedazos. Y no lo decimos nosotros, lo dicen personas que se han hospedado ahí y se han quejado del mal servicio, de los muebles viejos que hay en las habitaciones, que se desmoronan al tocarlos, con baños sucios y con un área de comida que carece de las mínimas normas de sanidad.

Pero bueno, por hoy se nos terminó el espacio. En otro artículo les comentaremos los grandes pecados que tiene Gabriel Igartúa en el sector hotelero; por lo que no es, ni será, un digno representante de la Coparmex Vallarta.

Mientras ellos se aferran a un poder imaginario, como si fuera su último aliento de vida, nosotros nos acordamos de la maravillosa letra del tango de Carlos Gardel, que les queda como anillo al dedo:

“Si arrastré por este mundo la vergüenza de haber sido y el dolor de ya no ser… Sueño… con el pasado que añoro, el tiempo viejo que lloro y que nunca volverá…”