El abogado ejecutado la madrugada de este jueves 17 de octubre en la zona romántica de Puerto Vallarta, Juan Felipe Morales García, estaba ligado al empresario gasolinero Oscar Eduardo Ramírez Pelayo, asesinado en Guadalajara en el año 2007, y cuyos familiares ofrecían una recompensa de 100 mil dólares a quien ayudara a atrapar a los homicidas.
Esta es una línea de investigación que siguen los Policías Investigadores adscritos a la Fiscalía Regional de Justicia con sede en Puerto Vallarta, pero la hipótesis más fuerte es una posible venganza contra este abogado, su hermano y cuñado –los tres fueron rafagueados con fusiles de asalto AK-47 mejor conocidos como “Cuerno de Chivo”—por atender un caso de un presunto despojo, ya que al parecer traían un litigio de desalojo de un terreno ocupado en la zona de Olas Altas.
Empero, hay una tercera hipótesis, y esta nos dice que los sujetos que fueron objeto de un atentado por la calle Basilio Badillo de esta ciudad, pertenecían a un grupo del crimen organizado presumiblemente relacionado con la llamada “Corona” y o “Los Aliados”, gente que antes pertenecía al grupo de Ignacio Coronel Villarreal y al de Orlando Nava Valencia, alias “El Lobo Valencia”, fundadores de la extinta “Resistencia” que después se alió con “Los Coroneles” (o lo que es lo mismo “La Corona”), para luchar contra el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los policías investigadores están indagando a fondo las actividades del abogado Juan Felipe Morales García y sus antecedentes, sobre todo el papel que desempeñó cuando fue ejecutado su cliente, Oscar Eduardo Ramírez Pelayo en 2007.
En esa ocasión, según los reportes de prensa, Oscar Eduardo Ramírez Pelayo fue asesinado en la calle Contadores de la colonia Lomas del Seminario cuando circulaba en una camioneta tipo Tacoma Toyota blanca
Hasta el momento, la Fiscalía del Estado, a cargo de Luis Carlos Nájera Gutiérrez de Velasco no ha emitido un informe sobre el móvil que orilló a los presuntos sicarios. Oscar Eduardo se dedicaba al comercio y era accionista de estaciones de gasolina y fábricas de calzado y ropa.
En esa ocasión, fue el hoy finado abogado Juan Felipe Morales García quien desestimó la versión de que la familia de su cliente había ofrecido 100 mil dólares por atrapar a los asesinos de Oscar Eduardo Ramírez Pelayo.
“No contamos con el capital para haberlo hecho” (la supuesta recompensa, declaró a medios de comunicación en el 2007.
Sobre el asesinato de esta madrugada de jueves en Puerto Vallarta, la jefatura de prensa de la policía municipal emitió el siguiente comunicado:
Siendo las 01:00 se recibió el reporte de que se escuchaban detonaciones de arma de fuego en el cruce de las calles Ignacio L. Vallarta y Venustiano Carranza en la colonia Emiliano Zapata y seguido de este se recibieron otros reportes en los que se mencionaba sobre algunas personas lesionadas en ese mismo cruce.
Al lugar acudieron varias unidades de la Policía Preventiva, quienes tuvieron a la vista un vehículo Volkswagen en color blanco con placas JHS4131 de Jalisco, a un masculino que se encontraba tirado sobre la banqueta, afuera de un restaurante de comida italiana, así como otro tirado sobe la calle Ignacio L. Vallarta, ambos muy lesionados, mientras que otro estaba con la mitad del cuerpo en la calle y sus piernas dentro del automotor pero ya sin vida.
En el lugar se hicieron presentes paramédicos de Bomberos y de la Cruz Roja quienes le dieron los primeros auxilios a los dos heridos, uno de ellos de nombre Antonio Camacho Vidal de 45 años de edad, quien presentaba dos impactos de bala en el tórax lado derecho, un impacto más en la pierna derecha a la altura de tibia y peroné con orificio de entrada y salida, así como posible fractura de la misma extremidad.
En cuanto al otro herido, se supo por voz de su cuñado Antonio Camacho, respondía al nombre de Juan Felipe Morales García, de oficio abogado, quien presentaba un impacto de bala en cráneo, con fractura y exposición de masa encefálica, así como fractura expuesta de clavícula izquierda y fractura expuesta de rotula derecha.
Ambos lesionados fueron trasladados al hospital Medasist por el más cercano, sin embargo minutos después de su arribo, Juan Felipe falleció a consecuencia de las severas lesiones que presentaba, en tanto que su cuñado fue estabilizado y trasladado al hospital regional.
En el sitio se presentaron elementos de la Secretaria de Marina, las unidades PR273, 299, 298, 355 y 282 de la Policía del Estado con veinte elementos de fuerza, agentes de la Policía Investigadora, bajo el mando del agente del Ministerio Público Osvaldo Delgadillo, el Subdelegado de la Fiscalía, Guillermo Arturo Navarro Canon, así como la perito del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, Lucia Campos Lara, quienes se encargaron de realizar las pesquisas.
En el sitio fueron localizados entre 35 y 40 cartuchos de bala calibre 2.23, de fusil AK-47, conocido como cuerno de chivo.
De los responsables solo se sabe que huyeron en dos camionetas, una blanca y otra negra con rumbo desconocido, por lo que se implementó un fuerte dispositivo por parte de la Policía Preventiva pero no lograron localizarlos.
Cabe mencionar que los hoy occisos y el herido son procedentes del municipio de Zapopan y tendrían algunas horas de haber llegado a este recinto turístico”.
Esta es una línea de investigación que siguen los Policías Investigadores adscritos a la Fiscalía Regional de Justicia con sede en Puerto Vallarta, pero la hipótesis más fuerte es una posible venganza contra este abogado, su hermano y cuñado –los tres fueron rafagueados con fusiles de asalto AK-47 mejor conocidos como “Cuerno de Chivo”—por atender un caso de un presunto despojo, ya que al parecer traían un litigio de desalojo de un terreno ocupado en la zona de Olas Altas.
Empero, hay una tercera hipótesis, y esta nos dice que los sujetos que fueron objeto de un atentado por la calle Basilio Badillo de esta ciudad, pertenecían a un grupo del crimen organizado presumiblemente relacionado con la llamada “Corona” y o “Los Aliados”, gente que antes pertenecía al grupo de Ignacio Coronel Villarreal y al de Orlando Nava Valencia, alias “El Lobo Valencia”, fundadores de la extinta “Resistencia” que después se alió con “Los Coroneles” (o lo que es lo mismo “La Corona”), para luchar contra el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los policías investigadores están indagando a fondo las actividades del abogado Juan Felipe Morales García y sus antecedentes, sobre todo el papel que desempeñó cuando fue ejecutado su cliente, Oscar Eduardo Ramírez Pelayo en 2007.
En esa ocasión, según los reportes de prensa, Oscar Eduardo Ramírez Pelayo fue asesinado en la calle Contadores de la colonia Lomas del Seminario cuando circulaba en una camioneta tipo Tacoma Toyota blanca
Hasta el momento, la Fiscalía del Estado, a cargo de Luis Carlos Nájera Gutiérrez de Velasco no ha emitido un informe sobre el móvil que orilló a los presuntos sicarios. Oscar Eduardo se dedicaba al comercio y era accionista de estaciones de gasolina y fábricas de calzado y ropa.
En esa ocasión, fue el hoy finado abogado Juan Felipe Morales García quien desestimó la versión de que la familia de su cliente había ofrecido 100 mil dólares por atrapar a los asesinos de Oscar Eduardo Ramírez Pelayo.
“No contamos con el capital para haberlo hecho” (la supuesta recompensa, declaró a medios de comunicación en el 2007.
Sobre el asesinato de esta madrugada de jueves en Puerto Vallarta, la jefatura de prensa de la policía municipal emitió el siguiente comunicado:
Siendo las 01:00 se recibió el reporte de que se escuchaban detonaciones de arma de fuego en el cruce de las calles Ignacio L. Vallarta y Venustiano Carranza en la colonia Emiliano Zapata y seguido de este se recibieron otros reportes en los que se mencionaba sobre algunas personas lesionadas en ese mismo cruce.
Al lugar acudieron varias unidades de la Policía Preventiva, quienes tuvieron a la vista un vehículo Volkswagen en color blanco con placas JHS4131 de Jalisco, a un masculino que se encontraba tirado sobre la banqueta, afuera de un restaurante de comida italiana, así como otro tirado sobe la calle Ignacio L. Vallarta, ambos muy lesionados, mientras que otro estaba con la mitad del cuerpo en la calle y sus piernas dentro del automotor pero ya sin vida.
En el lugar se hicieron presentes paramédicos de Bomberos y de la Cruz Roja quienes le dieron los primeros auxilios a los dos heridos, uno de ellos de nombre Antonio Camacho Vidal de 45 años de edad, quien presentaba dos impactos de bala en el tórax lado derecho, un impacto más en la pierna derecha a la altura de tibia y peroné con orificio de entrada y salida, así como posible fractura de la misma extremidad.
En cuanto al otro herido, se supo por voz de su cuñado Antonio Camacho, respondía al nombre de Juan Felipe Morales García, de oficio abogado, quien presentaba un impacto de bala en cráneo, con fractura y exposición de masa encefálica, así como fractura expuesta de clavícula izquierda y fractura expuesta de rotula derecha.
Ambos lesionados fueron trasladados al hospital Medasist por el más cercano, sin embargo minutos después de su arribo, Juan Felipe falleció a consecuencia de las severas lesiones que presentaba, en tanto que su cuñado fue estabilizado y trasladado al hospital regional.
En el sitio se presentaron elementos de la Secretaria de Marina, las unidades PR273, 299, 298, 355 y 282 de la Policía del Estado con veinte elementos de fuerza, agentes de la Policía Investigadora, bajo el mando del agente del Ministerio Público Osvaldo Delgadillo, el Subdelegado de la Fiscalía, Guillermo Arturo Navarro Canon, así como la perito del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, Lucia Campos Lara, quienes se encargaron de realizar las pesquisas.
En el sitio fueron localizados entre 35 y 40 cartuchos de bala calibre 2.23, de fusil AK-47, conocido como cuerno de chivo.
De los responsables solo se sabe que huyeron en dos camionetas, una blanca y otra negra con rumbo desconocido, por lo que se implementó un fuerte dispositivo por parte de la Policía Preventiva pero no lograron localizarlos.
Cabe mencionar que los hoy occisos y el herido son procedentes del municipio de Zapopan y tendrían algunas horas de haber llegado a este recinto turístico”.
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