Por Jorge Olmos Contreras
A
unas horas de que inicien las campañas de los candidatos que buscan alcanzar la
silla presidencial en Bahía de Banderas, el pánico y el temor fundado se ha
apoderado de los miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI), por
las negras expectativas que se yerguen sobre el candidato tricolor, José Gómez
Pérez, quien de plano la semana pasada estuvo a punto de tirar la toalla al observar
el rechazo casi generalizado entre la población a su candidatura y por el hecho
que desde el mismo Comité Directivo Estatal (CDE) lo han dejado solo y lo que
es peor, en manos de unos bandidos que sólo le han generado problemas y más
rechazo hasta en el sector de los medios de comunicación.
La
verdad, el caso de José Gómez es emblemático por la serie de errores que se han
cometido desde su casa de campaña y porque su cuñado –el actual alcalde Rafael
Cervantes—está empeñado en crearle el caldo de cultivo idóneo para que pierda,
desde otorgar el visto bueno para un desalojo masivo de colonos en Villas
Miramar, hasta marchas de burocráticas a quien el presidente pagó con cheques
sin fondos su más reciente salario y otras decenas de casos sonados de corrupción
que hacen crecer el “di no a José Gómez”.
DELINCUENTES DE LA PLUMA
Pero
lo peor de todo es que el mismo José Gómez está distanciado y secuestrado por
un puñado de delincuentes metidos a periodistas que llegaron a Bahía de
Banderas –cual grupito del crimen organizado que llegan a una plaza para
tomarla—para tratar de conseguir mucho dinero en forma fácil y, desde luego,
deshonesta.
Y
es que distanciado de los suyos cada día que pasa, y secuestrado emocional y
económicamente por delincuentes metidos a seudoperiodistas, José Gómez es
traicionado desde adentro y despreciado desde afuera. Hace agua su proyecto
político, pues diversos sectores tuvieron menos capacidad que otros para
adaptarse a la imposición de un José cada vez más alterado y resentido, indefendible
de sí mismo, obsesionado con un triunfo solo porque cree que ya le toca y
renegando del cuñado incómodo, a pesar de que desde la campaña del 2011 le
operó en contra a su nuevamente contrincante, Héctor Paniagua Salazar y su entonces
candidato Julio Larios, a quien también traicionó.
LA PESADILLA
Así
las cosas, se observa a un José
Gómez derrotado desde antes de iniciar la
campaña, mientras Adrián Guerra y Héctor Paniagua salen diario a la repesca de excluidos
y resentidos con el cuñado de Rafa Cervantes --otro patán de la política, podrido,
apestado y prácticamente muerto en vida--; pero José sólo observa acongojado y
se pregunta cómo es que se metió en esta pesadilla que debería de ser la
coronación de kilómetros y kilómetros de paseos ciclistas, traslados en
ambulancia gratis (que estaba destinada al DIF o a Protección Civil, donada por
los paisanos de Bahía en los Estados Unidos, pero su hermana Cuquita y su
cuñado Rafael se la consiguieron para su proyecto personal de dizque Siempre
con la Gente), cientos de sepelios y eventos del mismo municipio colocando su
nombre ahí, lo mismo en la fiesta que en el dolor con sus carpas y sillas. Todo
esto en la lógica del muchacho alterado, creía que ya le tocaba ser candidato
de su partido.
Pero
su loquera está llegando a su fin, ya casi vuelve en sí al mirar cómo su
proyecto en el que ha gastado cientos de miles de pesos –millones de pesos de
dudosa procedencia—se desmorona día con día. La cordura parece asomarse a su puerta,
pero sólo para darse cuenta cómo ha sido secuestrado económica y emocionalmente
por las rémoras de Puerto Vallarta que su mismísimo cuñado Rafa Cervantes le
recomendó y que ahora no haya como quitárselas de encima.
BONNIE Y CLYDE
Y
es que pudo haber visto coronados sus esfuerzos si no se haya hecho llegar a
Bonnie y Clyde, la pareja de pillos que se rumora tienen su secreto en la
montaña, Rodrigo Aguilera (a) "El ladrón de Liverpool", cuyos hijos
se avergüenzan de él al grado que lo bloquean del Facebook y nada quieren saber
de su carrera delictiva -en contraste con la bella y triunfadora madre de sus
hijos, quien está en la cúspide de su carrera como conductora estelar en el
canal de televisión del gobierno de Roberto Sandoval, allá en Tepic, y antes en
Televisa local, querida y reconocida en la sociedad nayarita y ante el gremio
periodístico estatal), pero (Rodrigo) ahora convive y cohabita con un Héctor
Colín (su amante y patrón con el que se da rienda suelta a sus bajas pasiones
todos los fines de semana luego de embrutecerse de alcohol en el bar cuasi Gay
Roxy), quienes con el pasquín "Siempre Libres" (del que son la
vergüenza para coraje y frustración de su dueño y fundador, Héctor García Lugo)
) ahora buscan atragantarse en una total locura de ambición por el botín de
convenios con el Ayuntamiento de Bahía de Banderas.
En
Bahía de Banderas, los mismos periodistas comentan que libre Dios a la Riviera
Nayarit y a sus plazas comerciales de que Rodrigo Aguilera vaya ahora a atracar
"La Surtidora" de Lago Real o las guayaberas de Paradise Plaza,
aunque acá se toparía con algunas cuentas pendientes que dejó con grupos nada
pacíficos con quienes por hablador, se metió en serios problemas.
Pronto,
dicen por Bahía de Banderas, esos grupos le cobrarán la factura a Rodrigo
Aguilera, mucho antes de que lo piense, por eso ya le está entrando miedo de
adentrarse por tierras nayaritas, pues lo están esperando por todo lo que ha
hecho en agravio de personas con las que nunca debió meterse.
Pero
bueno, estos pillos de poca monta quieren aplicarle a José Gómez la que le
aplicaron en Puerto Vallarta al joven Adrián Méndez "Archie",
candidato priista, al cual el hartazgo y voto de castigo de los vallartenses (y
múltiples traiciones, entre ellas la de la diabólica pareja Gay Colín-Aguilera)
derrotó ante Ramón Guerrero "El Mochilas", Plan "B" de
estos pillos, al grado de que antes de que cantara la autoridad electoral las
tendencias en la noche del día de la elección, ambos seudoperiodistas ya se
habían cambiado de camiseta para ir por Mochilas.
SU SECRETO EN LA MONTAÑA
Analizando
el comportamiento del "Ladrón de Liverpool" y su secreto en la
Montaña (el niño que nunca se hizo hombre, Héctor Colín) proyectan a todas
luces exactamente eso: que ahora van por Bahía, engañando a la gente y dañando
a José Gómez porque por supuesto que operarán a favor de sus actuales patrones
de Movimiento Ciudadano en Vallarta y seguramente ya planean asaltar a don
Adrián Guerra y a su equipo de trabajo.
NO PUDO EXTORSIONAR A TOÑO LUGO
Ojalá
que la gente de MC en Bahía de Banderas, que suma ciudadanos decentes,
comerciantes, empresarios, gente de trabajo, no se dejen sorprender por un
Rodrigo Aguilera rapaz y secuestrador emocional de incautos, extorsionando a
quien se deja (no como al delegado especial Toño Lugo, de quien se supo dejó en
paz, no por 50 mil pesos, sino por una llamada desde la SEGOB al raterillo Aguilera
a quien le dio diarrea tres días, lo que seguro afectó terriblemente en su vida
sexual). Así le pasó a quien claramente le opera en contra a José Gómez,
abriéndole frentes de conflicto.
Es
decir, Rodrigo quiso extorsionar a Toño Lugo, a quien le exigió 50 mil pesos
mensuales para no atacarlo en sus escritos de marras que le publican en El Sol
Siempre Libres --donde el muchacho cuasi mongolito, Héctor García Colín y su
madre son cómplices, pues disfrutan del dinero mal habido por Rodrigo--, pero
Toño tiene amigos en la Secretaría de Gobernación, donde le pusieron un estate
quieto al extorsionador del Sol, a quien no le quedó de otra que irse con su
música a otra parte. Desde entonces, enfocó todas sus baterías sobre José
Gómez, a quien le pidió otros 50 mil pesos con tal de que José lo aceptara como
su “aliado” y se convirtiera en su principal gatillero.
Pero
tonto y pasional (como todos los hombrecitos que tienen problemas de
personalidad) como lo es, Rodrigo equivocó la estrategia y con tal de conseguir
dinero (como en sus buenos tiempos con Chavita y Javier Bravo) se dedicó a
atacar a todos los periodistas que no comulgaran con el proyecto de José Gómez,
lo que provocó que prácticamente todos los medios se le fueran a la yugular al
candidato de los narcos, es decir, a José Gómez, quien ya no haya que hacer
para recuperar las relaciones perdidas con reporteros y columnistas serios de
Puerto Vallarta y Bahía.
El
candidato del PRI en Bahía ya tiene suficientes retos que vencer como para
todavía hacer corajes todos los días por las estupideces que cometen
prácticamente todo su séquito de inexpertos, lame botas, simuladores y
delincuentes como Redrogo Aguilera, quien presume entre líneas que ya lo tiene
secuestrado emocional y económicamente, en sus propios escritos.
Así
de sinvergüenzas estos atracadores y así de estulto José Gómez.
Al
pobre José no le queda otra que soportarlo y reírse pero de miedo cuando el
raterín le dice que le acomode como iguala 50 mil pesos que asegura vale su
pluma y el trabajo realizado a su favor. A José no le queda otra que aguantar a
este par de espanta pendejos. (Y perdonarán mi francés, pero literalmente eso
son este par de novios metidos a periodistas)
EL BOMBERO “PERIODISTA”
En
este contexto, José trata de darle seriedad a su proyección de imagen al sumar
a Luis Hernández a su equipo de prensa, pero el pobre también está sintiendo lo que es
estar en un equipo de chismosos y no comunicadores, pues vuelve a tratar con
divas que se la pasan remilgando de no haber sido nominados al Pulitzer, sino
pregúntenle a Ernesto Gómez, pero bueno de esas tenemos en Bahía de Banderas en
donde muchos aseguran que en la primer semana de campaña José escalará al
tercer puesto dejando su aspiración para otra ocasión.
Mientras
tanto, Ernesto Gómez –el hijo del ex secretario y sindico priista hace muchos
años, Ernesto Gómez Bernal—pretende rescatar la imagen de José Gómez y reparar
el daño provocado por Rodrigo y Héctor García Colín, cuando ya es demasiado
tarde para eso, pues el daño es irreversible.
Ernesto
Gómez, al igual que otros lambiscones de José Gómez, creen que tener un portal
que juega a periódico digital de noticias –hecho por no periodistas—es
suficiente para hacer y formar un candidato y llevarlo al poder.
Craso
error, Ernesto Gómez no es periodista, es abogado que juega al comunicador y si
José lo eligió a él para subsanar el boquete que le abrió en su imagen gente
como Rodrigo Aguilera o Nayar Araiza, está muy equivocado, pues lo peor en
medios para José Gómez apenas empieza y ni jugando a ser Julio Scherer sus “periodistas”
lambiscones lo van a salvar de la debacle total.
Pero
bueno, el PRI, Roberto Sandoval y su principal promotor, Edgar Veytia, se van a
dar cuenta del gran error que cometieron al imponer a José Gómez como
candidato… cuando sea demasiado tarde. (Columna publicada en www.vallartauno.com y en www.columnajorgeolmos.blogspot.com)
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