Por Jorge Olmos Contreras
Un conflicto social de grandes dimensiones es el que está por estallar en la Cruz de Loreto, municipio de Tomatlán, Jalisco, donde la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera ya está cansada de la impunidad con que se conduce un extranjero, el italiano Giuliano Gasparotto, quien se ostenta como representante de los dueños del desarrollo, supuestamente ecológico, autodenominado como “Hotelito Desconocido”, --que al parecer fue comprado por una firma desconocida, el Consorcio Hotelero W&G S.A. de C.V--, y se ha dedicado a provocar a los pescadores y atentar contra el equilibrio del estero al abrir la “boca” para poder ampliar el hotel, sin importar los daños que ocasiona.
A Giuliano Gasparotto tampoco le ha importado violar los convenios firmados por el Hotelito Desconocido, ni mucho menos las condiciones que le impuso el Instituto Nacional de Ecología (INE) para poder dar el visto bueno de su construcción en 1995.
Como si fuera cobijado por alguien muy poderoso –en ese lugar fue visto Raúl Salinas de Gortari en el último año del sexenio de su hermano, el ex presidente Carlos Salinas--, Giuliano Gasparotto apareció en la Cruz de Loreto en el 2008, año en que supuestamente el Consorcio Hotelero W&G S.A de C.V. le compró el hotel al también italiano Marcello Murzilli, y a partir de ahí comenzaron los problemas.
Prepotente y autoritario, Gasparotto desconoció el convenio que la firma W&G firmó el 21 de febrero del 2008 con la Cooperativa Cruz de Loreto, en donde se ratificaban los acuerdos que se firmaron por primera vez el cinco de febrero de 1996 y que dieron pie a que los pescadores permitieran la instalación del desarrollo ecológico “Hotelito Desconocido” pegado al estero El Ermitaño.
ACUERDOS ROTOS
El convenio se renovó varias veces y las cláusulas contienen los candados suficientes para evitar daños ecológicos al estero y la posibilidad de una convivencia armoniosa entre los dueños del hotel y la sociedad de pescadores.
Incluso, la empresa hotelera apoyaba dos veces al año a la Cooperativa con mil 500 dólares –y después con dos mil dólares—para desarrollar nuevos proyectos de siembra de camarón y peces, pero cuando le dijeron a los pescadores que el Hotelito Desconocido había sido vendido y comprado por otros empresarios, comenzaron las dudas.
De entrada, la nueva empresa Consorcio Hotelero W&G utilizó el mismo apoderado legal del anterior dueño –de nombre Ernesto Martínez Ortiz-- para firmar el nuevo convenio, con la desventaja para los pescadores de que el acuerdo tendría vigencia de un año, y no de cinco como los anteriores, es decir, terminó el 21 de febrero del 2009, año en que precisamente comenzó la pesadilla para los socios de la Cooperativa.
De entrada, Giuliano Gasparotto desconoció uno de los acuerdos elementales entre la Cooperativa y la empresa, que era sostener los empleos de los familiares de los pescadores dentro del hotel, ya que despidió a todos en masa y se ignora si fueron liquidados conforme a la ley federal del trabajo o simplemente echados.
PILOTES DE CONCRETO
Después, contrató guardias de seguridad agresivos y abusivos para amedrentar a los pescadores, y una vez con el control total del hotel –sin informarle a nadie si es gerente, dueño, socio o representante legal de W&G—empezó a realizar obras de ampliación sobre el estero, construyendo pilotes de concreto (prohibido por la resolución del INE) y atravesando andamios de acero y mangueras sobre la superficie central de “El Ermitaño”.
No solo eso, sino que también se atrevió a abrir –sin permiso de ninguna autoridad—la boca del estero, violando todos los acuerdos firmados por la empresa con la cooperativa y con las autoridades federales en 1996, con lo que causó el malestar general de los pescadores, quienes son los principales perjudicados, tanto en lo material como en lo físico, ya que por un lado escapan hacía al mar las especies que se reproducen en el embalse, y por el otro la corriente puede llevarse a quienes están pescando, con el riesgo de morir.
El año pasado, los empleados de Gasparotto abrieron tres veces la boca del estero, se tomaron fotografías de los daños y la Cooperativa procedió a denunciar al italiano ante todas las instancias que tienen que ver con la ecología, el medio ambiente y el agua, pero a la fecha, ninguna autoridad ha intervenido para detener el ecocidio de Giuliano.
Todavía peor, reta a los pescadores al usar lanchas de motor, prohibidas en el permiso que les dio el INE y alienta a sus empleados a que agredan a los cooperativistas, como ya sucedió el dos de noviembre, cuando un socio sorprendió a un trabajador del hotel pescando y le tomó una foto, pero el empleado de Gasparotto lo insultó, lo retó a golpes y más tarde lo alcanzó en la carretera para golpearlo y quitarle el celular con el que le había tomado la gráfica.
EL INE SE LAVA LAS MANOS
Llama la atención que el Instituto Nacional de Ecología (INE) prácticamente se lavó las manos cuando los cooperativistas le solicitaron su intervención, en una carta enviada el 29 d octubre del 2010 para que hiciera una auditoría ambiental al Hotelito Desconocido y donde le informaban sobre los atropellos del italiano, ya que respondió con evasivas y además le pasó la bolita a la Directora General de Denuncias Ambientales, Quejas y Participación Social de la Profepa, María Guadalupe Arminda García Coronel para “que proceda a realizar las acciones que estime pertinentes”.
Los pescadores también pidieron el apoyo del Director de Áreas Naturales Protegidas, con sede en Morelia, Michoacán, Humberto Gabriel Reyes Gómez; al delegado de la Conagua, Raúl Antonio Iglesias, al delegado de la Semarnap Jalisco, José de Jesús Álvarez del Castillo, pero nadie ha respondido ni cumplido con su deber.
Desesperados, los de la Cooperativa buscaron apoyo en el presidente municipal de Tomatlán, Juventino Sahagún Virgen, ya que los hechos delictuosos del italiano atentan contra el Programa de Ordenamiento Ecológico de ese municipio, pero el alcalde ni se ha inmutado en atenderlos, pese a las cartas que le enviaron el nueve y el 24 de noviembre del 2010.
Por ello, la Sociedad Cooperativa interpuso una denuncia popular ante la Profepa, por conducto de la abogada Isela Guadalupe López López, donde denuncia todas las arbitrariedades y violaciones de la legislación mexicana en materia ambiental por parte del italiano Gasparotto, la que fue recibida el 24 de junio del 2010.
Sin embargo, el delegado de la Profepa en Jalisco, José de Jesús Becerra Soto, informó a los pescadores que turnó la denuncia a la Subdelegación de Recursos Naturales para que proceda como corresponda y que una vez “que contemos con los resultados de las diligencias realizadas lo haremos de su conocimiento”.
Esto fue el tres de junio del 2010, y a la fecha, la Subdelegación de Recursos Naturales no ha efectuado ninguna diligencia al Hotelito Desconocido, donde el hartazgo está llegando a sus límites y podría suscitarse un fuerte conflicto social por negligencia de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
INFORMACION CLASIFICADA
LO QUE NOS FALTABA, RESULTA QUE EL CHEF THIERRY BLOUET No sólo fue denunciado por evasión fiscal y demandado por un asunto laboral, sino que también está siendo investigado por el uso indebido de status migratorio, pues el propietario del Café de los Artistas usa tres diferentes nacionalidades en nuestro país además de su residencia.
YA LE SALIERON DEFENSORES COMPRADOS AL DIPUTADO PANISTA CON licencia por Nayarit, Rafael Cervantes, pues un reportero del periódico “Noticias” se atrevió a comentar que “son puras mentiras” lo que difundimos sobre las transas del ex presidente del ejido de San José del Valle.
Para que no haya dudas ni malos entendidos, el columnista tiene en su poder copias de las denuncias que existen contra Rafael Cervantes y créanos que hay muchas irregularidades y elementos que permiten señalar que el diputado ha cometido atropellos que rayan en delitos penales, por lo que no es un buen prospecto a la alcaldía de Bahía de Banderas.
GOLPETEO INNECESARIO… Ahora que viene la sucesión en la dirigencia del Comité Directivo Municipal del PRI en Puerto Vallarta, a algunos les ha dado por denostar a medio mundo, le tiran a todo lo que se mueva y en su afán por quedar bien con otros, quedan mal con todos. Por ejemplo, los funcionarios más valiosos que tiene el gabinete de Chavita están siendo sometidos a un golpeteo innecesario sólo porque también son dirigentes de algún sector en las filas del tricolor.
Las víctimas son Roberto González y Jesús Sánchez, director de servicios públicos municipales y secretario general respectivamente. Los dos son atacados constantemente sin razón e injustamente, cuando son los que más chamba positiva le están sacando a la actual administración que dirige Salvador González Reséndiz.
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