Por Jorge Olmos Contreras
El asunto de la desaparición de la instructora de Pole Fitness, Erika Cueto, está por dar un giro de 180 grados, debido a las declaraciones que hizo ante el Ministerio Público, la socia de Erika, Claudia Molina García, quien asegura que ya dijo todo lo que sabía a las autoridades ministeriales y que ella, lo jura, nada tiene qué ver en la extraña desaparición de Erika Cueto.
A Claudia Molina la vimos esta semana en un conocido restaurante, nos entrevistamos con ella y nos contó cosas que, insisto, ya las declaró ante el MP, sólo que en la Fiscalía Regional han estado ocultando mucha información con el pretexto del sigilo y para no violar supuestamente el debido proceso.
Hay detalles muy interesantes en las declaraciones de Claudia Molina, como el sostener que la familia de Erika Cueto ha estado mintiendo en sus declaraciones ante el MP, que no aceptan, ojo, “las actividades clandestinas de Erika” y que no se ha revelado la tormentosa relación que sostenía con su novio, Robert Godínez.
Por estas declaraciones, Claudia Molina ha sido amenazada por la familia de Erika Cueto y alguien la ha mandado golpear con sujetos que llegaron a su casa para tal fin, pero se equivocaron y entraron a una casa vecina, nos contó la propia Claudia, quien dijo sospechar de Robert Godínez, el novio de Erika Cueto.
Las presiones sobre Claudia Molina han estado a la orden del día, no sólo la obligaron a hacerse la prueba del polígrafo, la cual ya se hizo en Guadalajara, sino que la han estado hostigando desde la Fiscalía Regional, donde el primer agente especial, Osvaldo Delgadillo, la quiso involucrar en un escenario de que fue vista en un Oxxo de Bahía de Banderas, lo cual resultó falso al observarse con detenimiento las cámaras de los diferentes establecimientos del vecino municipio.
A más de tres meses de este caso y en que Claudia ha sido invitada a declarar en varias ocasiones, no se ha encontrado ningún indicio de que esté involucrada en la desaparición de Erika Cueto. De hecho, en la entrevista, nos contó que ella no era compañera de cuarto de Erika, sino que era su socia
LA VERSIÓN DE CLAUDIA
En un escrito enviado como derecho de réplica, Claudia Molina sostiene lo siguiente:
“Siguiendo su artículo, le responderé paso por paso para no perder el hilo de mi queja, y le aseguro que YO SI cuento con todas las pruebas de lo que a continuación expongo:
-Nunca he sido una compañera de cuarto de Erika Cueto, yo vivo sola con mi pequeña hija, y alguna vez surgió el plan de rentar una propiedad con alberca, juntas y compartir los gastos, sin embargo, estos planes, por diversas razones, nunca se llevaron a cabo.
-Sí visitaba con frecuencia a mi amiga y socia Erika Cueto de la misma manera que ella me visitaba a mí, al igual que sucede en todas las amistades, sin embargo, decir que a veces "caía" a dormir a su casa, está muy lejos de la verdad. Vivimos juntas una breve temporada, menos de un mes, ella me hizo el gran favor de apoyarme, ya que en donde vivía tuve problemas con un vecino (de acoso sexual y grave) por lo cual, en busca de una solución rápida a la situación, me mudé con ella en lo que encontraba con calma una vivienda para mi hija y para mí, durante todo ese tiempo, solventé todos los gastos de la vivienda, renta, gas, luz, agua, comida, etc., lo cual venía bien a Erika que siempre tenía problemas económicos e incluso debía rentas atrasadas. Al momento de mudarme, se quedaron pertenencias mías en su casa, que dada la confianza, no tuve prisa en sacar, toda vez que ella se encontraba sumamente ocupada por su evento de Pole Fitness (competencia y congreso), desafortunadamente, al momento de su desaparición, al contactar a su familia para recoger mis pertenencias, ellos se negaron, argumentando que el agente del MP no les permitía sacar nada de casa de Erika, lo cual es una de las muchas mentiras que la familia Cueto Vázquez ha dicho en torno al caso de desaparición de Erika, hasta la fecha la familia continúa en su negativa de devolver las cosas, muchas de valor y que ante el agente del MP admitieron que son mías.
La casa de Erika NO se encuentra invadida por extraños, esa propiedad se encuentra actualmente intestada y la familia del propietario se encuentra en la disputa legal por el inmueble, y son una de las partes quienes la habitan actualmente. La familia Cueto Vázquez ocupó la propiedad a finales del año pasado y tuvo que entregarla ante el MP, y al desalojarla (pero) se llevaron gran parte de mis pertenencias.
-Erika Cueto no me contrató para trabajar en el Studio de Pole Fitness, fue con mi dinero que se abrió ese negocio, y desde un principio quedó clara nuestra sociedad de negocios, yo trabajé y financié dicho lugar en una relación de igualdad, incluso, fui aval del contrato de arrendamiento del local. Cuento con todas las pruebas para demostrar que toda la familia de Erika Cueto estaba plenamente enterada de este hecho, en varios medios de comunicación se han referido a mí como una empleada, sin embargo, prensa como Televisión Azteca y Vallarta Opina se na negado a mencionar mi nombre puesto que no cuentan con ninguna prueba de que era empleada, tampoco cuentan con ninguna prueba que me involucre en la desaparición de mi amiga y socia. Aun así, a los días de desaparecer Erika, su familia ingresó a nuestro local con cerrajero y saquearon todo el lugar, sin darme explicaciones, haciéndolo en horario en que sabían que yo no me encontraba ahí, con total alevosía y ventaja, sin importar las alumnas, ni el buen nombre de Erika y mío, y sosteniendo que yo soy empleada, pero diciendo a nuestras alumnas que vean conmigo lo de las mensualidades que pagaron.
-En ninguna ocasión me negué a la prueba del polígrafo, en cuanto se dieron las condiciones (de mi salud y de tener con quién dejar a mi hija todo un día al cuidado de alguien más) acudí a la ciudad de Guadalajara a realizar dicha prueba, de la cual no tengo el resultado, y poco me preocupa, ya que en todas las ocasiones que el MP ha solicitado mi presencia he acudido y contestado todas las preguntas con total veracidad, fue la familia Cueto Vázquez quienes presionaron para dicha prueba, toda vez que el MP corroboró la información que yo proporcioné.
-Usted menciona al novio de Erika Cueto como Robert Domínguez, sin embargo, conmigo siempre se presentó como Robert Godínez, e incluso su perfil de facebook también aparece como Robert Godínez, quien en múltiples ocasiones era celoso y posesivo con Erika e incluso la agredía verbal y sexualmente, supongo que la familia omitió éste detalle, ya que desde un principio lo han protegido, aun cuando al momento de desaparecer Erika ambos se encontraban desaparecidos e incluso se creyó que estaban juntos, 36 horas (aproximadamente) después de perder contacto con Erika fue que se pudo localizar a Robert, más no así a Erika.
A más de tres meses de este caso y en que Claudia ha sido invitada a declarar en varias ocasiones, no se ha encontrado ningún indicio de que esté involucrada en la desaparición de Erika Cueto. De hecho, en la entrevista, nos contó que ella no era compañera de cuarto de Erika, sino que era su socia
LA VERSIÓN DE CLAUDIA
En un escrito enviado como derecho de réplica, Claudia Molina sostiene lo siguiente:
“Siguiendo su artículo, le responderé paso por paso para no perder el hilo de mi queja, y le aseguro que YO SI cuento con todas las pruebas de lo que a continuación expongo:
-Nunca he sido una compañera de cuarto de Erika Cueto, yo vivo sola con mi pequeña hija, y alguna vez surgió el plan de rentar una propiedad con alberca, juntas y compartir los gastos, sin embargo, estos planes, por diversas razones, nunca se llevaron a cabo.
-Sí visitaba con frecuencia a mi amiga y socia Erika Cueto de la misma manera que ella me visitaba a mí, al igual que sucede en todas las amistades, sin embargo, decir que a veces "caía" a dormir a su casa, está muy lejos de la verdad. Vivimos juntas una breve temporada, menos de un mes, ella me hizo el gran favor de apoyarme, ya que en donde vivía tuve problemas con un vecino (de acoso sexual y grave) por lo cual, en busca de una solución rápida a la situación, me mudé con ella en lo que encontraba con calma una vivienda para mi hija y para mí, durante todo ese tiempo, solventé todos los gastos de la vivienda, renta, gas, luz, agua, comida, etc., lo cual venía bien a Erika que siempre tenía problemas económicos e incluso debía rentas atrasadas. Al momento de mudarme, se quedaron pertenencias mías en su casa, que dada la confianza, no tuve prisa en sacar, toda vez que ella se encontraba sumamente ocupada por su evento de Pole Fitness (competencia y congreso), desafortunadamente, al momento de su desaparición, al contactar a su familia para recoger mis pertenencias, ellos se negaron, argumentando que el agente del MP no les permitía sacar nada de casa de Erika, lo cual es una de las muchas mentiras que la familia Cueto Vázquez ha dicho en torno al caso de desaparición de Erika, hasta la fecha la familia continúa en su negativa de devolver las cosas, muchas de valor y que ante el agente del MP admitieron que son mías.
La casa de Erika NO se encuentra invadida por extraños, esa propiedad se encuentra actualmente intestada y la familia del propietario se encuentra en la disputa legal por el inmueble, y son una de las partes quienes la habitan actualmente. La familia Cueto Vázquez ocupó la propiedad a finales del año pasado y tuvo que entregarla ante el MP, y al desalojarla (pero) se llevaron gran parte de mis pertenencias.
-Erika Cueto no me contrató para trabajar en el Studio de Pole Fitness, fue con mi dinero que se abrió ese negocio, y desde un principio quedó clara nuestra sociedad de negocios, yo trabajé y financié dicho lugar en una relación de igualdad, incluso, fui aval del contrato de arrendamiento del local. Cuento con todas las pruebas para demostrar que toda la familia de Erika Cueto estaba plenamente enterada de este hecho, en varios medios de comunicación se han referido a mí como una empleada, sin embargo, prensa como Televisión Azteca y Vallarta Opina se na negado a mencionar mi nombre puesto que no cuentan con ninguna prueba de que era empleada, tampoco cuentan con ninguna prueba que me involucre en la desaparición de mi amiga y socia. Aun así, a los días de desaparecer Erika, su familia ingresó a nuestro local con cerrajero y saquearon todo el lugar, sin darme explicaciones, haciéndolo en horario en que sabían que yo no me encontraba ahí, con total alevosía y ventaja, sin importar las alumnas, ni el buen nombre de Erika y mío, y sosteniendo que yo soy empleada, pero diciendo a nuestras alumnas que vean conmigo lo de las mensualidades que pagaron.
-En ninguna ocasión me negué a la prueba del polígrafo, en cuanto se dieron las condiciones (de mi salud y de tener con quién dejar a mi hija todo un día al cuidado de alguien más) acudí a la ciudad de Guadalajara a realizar dicha prueba, de la cual no tengo el resultado, y poco me preocupa, ya que en todas las ocasiones que el MP ha solicitado mi presencia he acudido y contestado todas las preguntas con total veracidad, fue la familia Cueto Vázquez quienes presionaron para dicha prueba, toda vez que el MP corroboró la información que yo proporcioné.
-Usted menciona al novio de Erika Cueto como Robert Domínguez, sin embargo, conmigo siempre se presentó como Robert Godínez, e incluso su perfil de facebook también aparece como Robert Godínez, quien en múltiples ocasiones era celoso y posesivo con Erika e incluso la agredía verbal y sexualmente, supongo que la familia omitió éste detalle, ya que desde un principio lo han protegido, aun cuando al momento de desaparecer Erika ambos se encontraban desaparecidos e incluso se creyó que estaban juntos, 36 horas (aproximadamente) después de perder contacto con Erika fue que se pudo localizar a Robert, más no así a Erika.
-Usted menciona a la Sra. Jezabel Olmos, como una enemiga de Erika con quien tuvo una discusión por facebook, esto es verdad, pero también es cierto que ellas tuvieron un enfrentamiento en persona el año pasado en la ciudad de México, toda vez que cada una tiene puntos de vista totalmente diferentes de cómo hacer "pole".
ROBERT GODÍNEZ
Al referirse a Robert Godínez, dijo que en múltiples ocasiones era celoso y posesivo con Erika e incluso la agredía verbal y sexualmente, “supongo que la familia omitió éste detalle, ya que desde un principio lo han protegido, aun cuando al momento de desaparecer Erika ambos se encontraban desaparecidos e incluso se creyó que estaban juntos, 36 horas (aproximadamente) después de perder contacto con Erika fue que se pudo localizar a Robert, más no así a Erika”.
También dijo que no cuenta con una averiguación previa en Michoacán, que no tiene deudas con la justicia michoacana.
Manifestó asimismo lo siguiente: “En mi caso, todo lo que he declarado ha sido apegado a la verdad, y como tal se ha comprobado, razón por la cual desde hace 2 meses ya no se me ha solicitado mi colaboración, sin embargo, la familia Cueto Vázquez ha hecho declaraciones falsas sobre mi persona, desconozco la razón ya que todo el año que conviví con Erika la apoyé incondicionalmente y ella a mí, puedo decir, literal, que tuvo que comer todo ese año en gran parte a que yo le proveía de dinero y alimentos ya sea en mi casa o en la de ella, nuestra amistad es incondicional. Dada las falsas declaraciones de la familia, han sido ellos mismos quienes han entorpecido y desviado la investigación, sin mencionar que la falsedad de declaración está constituido como un delito federal y grave.
ROBERT GODÍNEZ
Al referirse a Robert Godínez, dijo que en múltiples ocasiones era celoso y posesivo con Erika e incluso la agredía verbal y sexualmente, “supongo que la familia omitió éste detalle, ya que desde un principio lo han protegido, aun cuando al momento de desaparecer Erika ambos se encontraban desaparecidos e incluso se creyó que estaban juntos, 36 horas (aproximadamente) después de perder contacto con Erika fue que se pudo localizar a Robert, más no así a Erika”.
También dijo que no cuenta con una averiguación previa en Michoacán, que no tiene deudas con la justicia michoacana.
Manifestó asimismo lo siguiente: “En mi caso, todo lo que he declarado ha sido apegado a la verdad, y como tal se ha comprobado, razón por la cual desde hace 2 meses ya no se me ha solicitado mi colaboración, sin embargo, la familia Cueto Vázquez ha hecho declaraciones falsas sobre mi persona, desconozco la razón ya que todo el año que conviví con Erika la apoyé incondicionalmente y ella a mí, puedo decir, literal, que tuvo que comer todo ese año en gran parte a que yo le proveía de dinero y alimentos ya sea en mi casa o en la de ella, nuestra amistad es incondicional. Dada las falsas declaraciones de la familia, han sido ellos mismos quienes han entorpecido y desviado la investigación, sin mencionar que la falsedad de declaración está constituido como un delito federal y grave.
Por mi parte, sigo confiando que Erika regresará pronto, y que este trago amargo pasará, si no he querido defenderme de las acusaciones es porque es mi deseo esperar a que ella regrese, cuando ella regrese sé que todo se aclarará”.
En su misiva y luego en la entrevista que sostuvimos con Claudia Molina, pidió discreción sobre algunos tópicos de la carta y de sus declaraciones “toda vez que la ha sido la familia y el novio de Erika quienes me han atacado continuamente, me dejaron sin negocio, y ahora quieren ensuciar mi reputación, no aceptan las actividades clandestinas de Erika, de las cuales yo me enteré después de su desaparición y en las cuales NUNCA he participado, han hackeado mis cuentas de correo y de redes sociales, comprendo que el dolor nos puede hacer cometer actos injustos, pero estos ataques deben parar, por muchos conexos que tenga la familia con la policía estatal, no deben afectarme de esa manera sólo porque están desesperados”.
No sabemos a qué se refiere Claudia Molina sobre las “actividades clandestinas” de Erika Cueto, pero se presume que acudía a fiestas con personas que podrían haberla metido en problemas.
Y bueno, hay que esperar a ver qué surge de los dichos de Claudia Molina, por lo pronto, el hostigamiento hacía su persona continúa, ya que el pasado jueves 05 de marzo le llamaron a su celular personas que dijeron ser policías federales y que la invitaban a platicar con ellos en un domicilio desconocido.
Desde luego, Claudia tiene miedo por lo que le pueda pasar.
En su misiva y luego en la entrevista que sostuvimos con Claudia Molina, pidió discreción sobre algunos tópicos de la carta y de sus declaraciones “toda vez que la ha sido la familia y el novio de Erika quienes me han atacado continuamente, me dejaron sin negocio, y ahora quieren ensuciar mi reputación, no aceptan las actividades clandestinas de Erika, de las cuales yo me enteré después de su desaparición y en las cuales NUNCA he participado, han hackeado mis cuentas de correo y de redes sociales, comprendo que el dolor nos puede hacer cometer actos injustos, pero estos ataques deben parar, por muchos conexos que tenga la familia con la policía estatal, no deben afectarme de esa manera sólo porque están desesperados”.
No sabemos a qué se refiere Claudia Molina sobre las “actividades clandestinas” de Erika Cueto, pero se presume que acudía a fiestas con personas que podrían haberla metido en problemas.
Y bueno, hay que esperar a ver qué surge de los dichos de Claudia Molina, por lo pronto, el hostigamiento hacía su persona continúa, ya que el pasado jueves 05 de marzo le llamaron a su celular personas que dijeron ser policías federales y que la invitaban a platicar con ellos en un domicilio desconocido.
Desde luego, Claudia tiene miedo por lo que le pueda pasar.
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