miércoles, 20 de abril de 2016

LUIS ÁNGEL CANTÚ, EL PORFIRIO DÍAZ DEL FIDEICOMISO DE TURISMO, LLEVA 22 AÑOS EN EL COMITÉ TÉCNICO Y METE LAS MANOS A MÁS DE 90 MILLONES DE PESOS




Por Jorge Olmos Contreras

En el sector empresarial de Puerto Vallarta ya se le conoce como “El Porfirio Díaz” del Fideicomiso de Turismo, debido a que tiene ya 22 años ostentando el cargo de secretario del Comité Técnico, sin que nadie se haya atrevido a pedirle su renuncia, entre otras cosas, porque es el que mete las manos en todas las decisiones que tienen que ver con el destino que se le da a los recursos que se generan por el Impuesto de Hospedaje y que este año se estima alcanzaran la friolera cantidad de 90 millones de pesos.

 
La historia se remonta hasta el año de 1996, cuando el entonces presidente Municipal, el panista Fernando González Corona, firmara el contrato de Fideicomiso de Turismo de Puerto Vallarta para dar paso a la constitución del organismo de promoción turística de la ciudad, pionero en el país, por el equilibrio de participación entre la iniciativa privada y el gobierno, gobernado de forma colegiada por un Comité Técnico, que toma las decisiones sobre el uso de los recursos públicos provenientes del impuesto sobre hospedaje. En aquél entonces, Fernando González cubrió los intereses de sus negocios de Tiempo Compartido (Timeshare) y para ello designó a una persona de todas sus confianzas, a su achichincle, Luis Ángel Cantú Treviño, como secretario del Comité Técnico, en representación de la llamada Asociación de Desarrolladores y Promotores Turísticos (Adeprotur) y un representante de la Asociación de Hoteles como presidente del mismo.

Pues bien, en este año 2016, Luis Ángel Cantú está cumpliendo 22 años de cuidar los intereses de su patrón en el Fideicomiso de Turismo, un organismo que se ha caracterizado por su opacidad y para muestra, habría que señalar, que aún cuando la ley los obliga a transparentar el uso de sus recursos y publicarlos en el portal de transparencia de internet, este periodista, ha hecho una exhaustiva investigación y no ha podido lograr localizar el portal de este organismo que en el 2015, logró recaudar mas de 80 millones de pesos y que para el 2016, se pronostica, una cantidad superior a los 90 millones, suma nada despreciable para hacer negocios jugosos al amparo del responsable de firmar todos los documentos de este organismo público, es decir, por el Cantú Treviño.

TODO PASA POR SUS MANOS

Y es que por él pasan licitaciones, adjudicaciones, contratos y hasta cambios de divisa –incluso él mismo se encarga de elegir la Casa de Cambio que hará la conversión de la moneda, de los millones de pesos, que deben convertirse a dólares para el pago de los proveedores en el extranjero--; sólo imaginemos que, si al año se cambian tres millones de dólares, con un centavo de dólar de comisión, al año suma la nada despreciable cantidad de 510 mil pesos, aunque el porcentaje puede variar… Y también los favores que se crean con este compromiso.

Hábil para tejer redes, Luis Ángel Cantú, ha hecho bloque de poder al interior del órgano de gobierno con personajes como Carlos Gerard, Oscar Pérez (ex director de turismo y ex secretario del Mochilas), y Teresita Marmolejo, esta ultima, famosa por el tráfico de influencias que utiliza para favorecer a sus empresas y las de sus amigos, de tal forma que se ponen de acuerdo y sin importar la calidad de las personas físicas y morales a las que asignan contratos, se reparten el botín, utilizando el precepto “todos ganan”.

Luis Ángel Cantú es conocido al interior del Fideicomiso, no sólo como “El Porfirio Díaz”, sino también como “El cáncer””, una enfermedad maligna, complicada de erradicar, agresiva, dañina y difícil de tratar.

Todas estas características describen a este personaje, famoso por salirse con la suya, por patear la silla cuando las decisiones no le favorecen, muy elocuente en su rostro cuando muestra su enojo, especialista en entrampar y habilidoso para sacar acuerdos; su misión es cuidar los negocios de su patrón, Fernando González Corona, pero ha aprendido tanto en 22 años, que no le fue nada difícil aprender a llevar agua a su molino. Nadie conoce mas de las entrañas de este organismo que el mismo Cantú. Controla el fideicomiso a su antojo, los contadores, abogados y directivos, todos le responden a él, son inamovibles, pues ellos conocen todo el pasado histórico de este personaje. De hecho, se asegura que para mantener su fidelidad --a espaldas del Consejo Técnico por supuesto--, ha dispuesto de un bono de productividad semestral para ellos por el orden de los 40 mil pesos; de esta forma, controla a su antojo todas las áreas del Fidetur.

PIDEN MODIFICAR EL REGLAMENTO 


Al interior del organismo, están hartos de él, inclusive hay consejeros que no están de acuerdo en que la Adeprotur tenga 22 años gobernando el Fidetur, por lo tanto, han propuesto modificar el reglamento para poner una vigencia a los miembros consejeros, pero sin mucho éxito.

En una ocasión se propuso limitar a cinco años la participación e inhabilitar otros cinco para poder regresar. Hay una corriente al interior que piensa que se requiere de una oxigenación, que se necesita gente capaz para colaborar con el destino, sin embargo, los intentos han sido en vano, ya que cuando llega una propuesta fresca e innovadora al Comité, inmediatamente es sacada de la orden del día por parte de Cantú Treviño, quien, al ostentar el puesto de secretario, inmediatamente las veta, por considerar que vulnera sus pretensiones de seguir controlando el jugoso presupuesto, es decir, las ve como una amenaza a los interés suyos y los de su patrón.

En esta historia de 22 años, hemos conocido un Fideicomiso que brilla por sus escándalos mediáticos, ya que Director que llega y no se cuadra con Luis Ángel Cantú, es despedido de inmediato. Aún recordamos la despedida del ex director Rolando Miravete, quien se encontraba de gira por Sudamérica y se enteró que estaba dado de baja a través de los medios de comunicación.

De nadie era desconocida su mala relación con Cantú, ya que Miravete empezó a hurgar en los abusos de Luis Ángel, por lo tanto, éste hizo hasta lo imposible por despedirlo, y finalmente lo logró.

EL DICTADOR


Es una especie de dictador dentro del Fideicomiso, nadie tiene autorizado proporcionar información sin considerarlo. Otro ex director de turismo, Salvador Peña, es su informante y le cubre las espaldas; tiene la instrucción de que ningún documento se envía o recibe, sin tener su conocimiento, por tal motivo, Salvador pasa tres días de la semana en la oficina de Adeprotur.

Pero Salvador Peña prefiere guardar silencio, no quiere meterse en problemas, menos cuando está al filo de su jubilación y no le conviene contrapuntear a la “máxima autoridad”.

Como pueden ver, esa oficina, tiene una mandamás, que ningún presidente ha podido contrarrestar.

“El cáncer” es el primer responsable de que el organismo mencionado tenga una pésima imagen con la comunidad, pues en 22 años ha controlado en lo oscurito todas las decisiones que ahí se toman, y con la justificación de que a Vallarta le va bien, maquilla cifras como las del Aeropuerto. Por ejemplo, pregonan que hubo un incremento de 700 mil nuevos pasajeros, pero en realidad, se trata de trafico de pasajeros, esto implica que son llegadas y salidas, por tanto, no es un aumento como tal, se trata de la mitad de lo que presumen. El tiempo compartido es la prioridad, esa es su misión y a sus patrones debe lealtad.

¿CUÁNTOS AÑOS MÁS?


Por ello, muchos se preguntan cuántos años mas durará Cantú, por que parece que después de mas de 20 años, tiene toda la intención de seguir haciendo de las suyas y seguir manipulando los mas de 90 millones de presupuesto que este año se recaudarán. De hecho, no son pocos los hoteleros que cuestionan, el por qué el poder recae sobre la Adeprotur, pese a que históricamente, de acuerdo a los estudios de mercado, el acoso de los vendedores de tiempo compartido es una de las dos cosas que más repudian de nuestro destino; entonces es incomprensible, que un sector que no aporta al 3% de la tarifa sobre hospedaje, sea responsable de todas las decisiones que afectan o benefician a la ciudad en materia de turismo. La respuesta es simple, se trata de cuidar el negocio y nada mas.

Esta es la primera parte de una investigación que inicia hoy y que aún tiene mucho tema de donde cortar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario