LOS SECRETOS DE ANTONIO LUGO MORALES, SUS FILTRACIONES Y EL DAÑO COLATERAL A LA CAMPAÑA DE ANDRÉS GONZÁLEZ PALOMERA

Por Jorge Olmos Contreras

Confeccionado en los sótanos de la política chaquetera de Jalisco y aprovechando una “estrecha relación” con el diputado Manlio Fabio Beltrones, Antonio Lugo Morales es de esos tipos que gusta pasar como intelectual para apantallar a bobos, conquistar féminas e intimidar a sus coterráneos y adversarios políticos. Es un sujeto nada confiable, pero que ha logrado incrustarse en el Comité Directivo Municipal (CDM) del PRI en Puerto Vallarta, por un descuido de la dirigencia nacional que preside César Camacho Quiroz.

Y como es un protagonista incansable y muy dado a los reflectores, pues muere para que los medios de comunicación volteen a verlo y tomarlo en cuenta, ha iniciado una campaña que tiene muchos visos de hipocresía y en la que supuestamente intenta posicionar el buen nombre del candidato del PRI, Andrés González Palomera.

En el fondo, lo único que busca Antonio Lugo Morales –Fantomas pa los cuates, decían en la administración de Gustavo González Villaseñor en donde fue secretario general, por aquello de ratero y elegante—es sacar raja del momento político para entrar de lleno al próximo gobierno municipal, en el hipotético caso de que Andrés González Palomera ganara las elecciones constitucionales y se convirtiera en alcalde de Vallarta.

COMO DIVA EN PASARELA

Por ello anda como diva en pasarela y se la ha ocurrido las desfachatez de ir a los programas de noticias radiofónicas en donde repite una y otra vez que “debemos profesionalizar la política”, como si la praxis de la misma no fuera por sí sola un conjunto de suciedades donde algunos seres humanos –sobre todo los políticos mexicanos—recurren a sus más bajos instintos para nadar en la inmundicia con tal de lograr el objetivo alcanzado a costa de lo que sea, es decir, que con tal de convertirse en candidato a un puesto de elección popular, director o funcionario de alto nivel, utilizan todo tipo de herramientas poco convencionales para destruir y socavar a sus compañeros de partido, a sus amigos, a sus compadres y a veces hasta a sus propios hermanos y familiares.

Antonio Lugo Morales es el mejor prototipo de esta clase de políticos, que golpean desde lo oscuro, que filtran información para denostar a sus oponentes y que utilizan cualquier cantidad de artimañas con tal de exhibir en la arena pública –y también en lo interno—a aquellos hombres y mujeres que por alguna razón se confrontaron con él, que salieron de su imaginario “círculo de confianza” o porque los considera enemigos directos.

Y bueno, sin importar el daño colateral que sus acciones le puedan acarrear al candidato del PRI a la alcaldía de Vallarta, Andrés González Palomera, Lugo Morales anda desatado y nadie al interior del priismo local ha sido prudente como para exigirle que se detenga, toda vez que a 20 días de que inicie la campaña político electoral, los daños y perjuicios de Toño Lugo podrían ser tan severos para Andrés, que lo podrían enfilar rumbo al despeñadero.

LA AMENAZA ELEGANTE

En este escenario, a Fantomas se le acaba de ocurrir la peregrina idea de convocar a una rueda de prensa ayer martes para anunciar que su partido va a amonestar a los tres regidores que el PRI tiene en el pleno del Ayuntamiento de Puerto Vallarta, por haber votado a favor de la desincorporación de valiosos predios municipales para venderlos y pagar las deudas del municipio.

Es muy probable que los ediles Adrián Méndez González, Jesica Yerena y Tito Yerena, todavía estén muertos de la risa por semejante disparate, sobre todo porque la información viene de Antonio Lugo Morales, un personaje que no tiene la mínima moral para criticar a sus compañeros y que asume una postura de dirigente priista, cuando no es ni nunca va a ser presidente de los priistas en Puerto Vallarta.

Sólo a un tonto se le puede ocurrir querer sancionar a los regidores a unos días de que arranque la campaña constitucional; pero más estultos resultan los priistas que supuestamente controlan al partido, por permitir que un sujeto de la calaña de Antonio Lugo tome la batuta y les de semejante exhibida.

SIN MEMORIA

Y es que el punto no es la noticia de la amonestación, quizá los tres regidores del PRI se merezcan hasta la expulsión por semejante voto que sin duda es lesivo para los vallartenses, sino porque no es el momento político, ni Antonio Lugo es el mejor mensajero para dar esta información, ya que se corre el riesgo de que le refresquen en la cara al mismo Toño Lugo y de pasada al señor González Palomera y otros ex regidores tricolores, la impune (nunca les hicieron nada) aprobación de un crédito de 450 millones de pesos en la administración de Javier Bravo que todavía se debe y que es parte de la mala situación financiera del Ayuntamiento.

Toño Lugo no era regidor en ese momento, pero sí era un priista que no dijo nada públicamente como lo hace ahora.

Por el contrario, este señor que quiere “profesionalizar la política”, echó mano de lo único que sabe hacer bien –la tenebra con su aderezo de grilla barata—para filtrar información a la entonces comunicadora de la estación de radio La Explosiva, Susana Carreño, donde exhibe y golpea en una forma por demás ruin a su “amigo” y compañero de partido, Andrés González Palomera.

Tenemos copias de los correos electrónicos con fechas del año 2011, donde Antonio Lugo Morales envía información aparentemente delicada de Andrés González Palomera, incluso hay una extensa carta en donde Lugo Morales señala a por lo menos cinco políticos que según él, abandonaron la asociación civil “Hola Vallarta” por no querer saber nada más de Andrés González. Entre otros está César Abarca, Víctor Hugo Fernández Flores, Martín Vázquez, Gregorio Peña, Remberto Quintero, Jimmy Navarro.

En un párrafo de esta misiva, Toño Lugo le comunica a Susana Carreño lo siguiente: “Por la actitud incongruente de González Palomera, de entreguismo y de comparsa en la corrupción de la administración de Javier Bravo, “Hola Vallarta” se esfumó como movimiento ciudadano, hoy nuevamente intenta González Palomera reagrupar a esa asociación civil, sin embargo, ni Antonio Lugo, ni César Abarca, ni Goyo Peña y mucho menos Víctor Hugo Fernández Flores, serían parte del reciclaje de lo que quedó de Hola Vallarta, unos porque traen proyectos propios y otros porque trabajan en la actual administración municipal”.

Hoy, lo que son las cosas y las vueltas que da la vida y la política, César Abarca va a coordinar la campaña de Andrés; Goyo Peña va en la planilla de regidores y Reemberto Quintero se prepara para tomar la Dirección --¡otra vez!—de Obras Públicas.

La carta la iremos desmenuzando poco a poco, así como otros correos, pero por lo pronto, le podemos adelantar que Toño Lugo utilizaba a su novia, quien se dice llamar Iris Ramírez Barraza y quien trabaja o trabaja en Protección Civil, para reenviar estos emails, quizá con la intención de no dejar huella, pero la cadena original parte del correo de Lugo Morales, el de Antonio_lugom@yahoo.com

INFORMACION CLASIFICADA

POR CIERTO, EL DOCTOR JORGE VILLANUEVA HERNANDEZ, también fue víctima de una campaña de desprestigio en los momentos cruciales en que hace unos años el PRI iba a elegir a su candidato a diputado federal. En la contienda interna, aparecían Toño Lugo Morales y Jorge Villanueva, pero “alguien” filtró información al periódico El Sol Siempre Libres, donde denostaban severamente al doctor Villanueva.

Se trataba de una serie de correos –quizá muy bien pagados—que dibujaba el tormentoso pasado estudiantil de Jorge Villanueva, el objetivo era que el PRI no lo eligiera como candidato, pero al final sí lo hizo, aunque en la constitucional Jorge perdió frente al Peri Cuevas.

Al parecer el doctor Villanueva ordenó una investigación para saber el origen de los ataques, pero en periódico de marras les dijeron que les habían llegado unos “correos anónimos”, por lo que se rastreó la dirección ID de donde provenían los emails y se descubrió que el hilo llegaba a una computadora de Protección Civil, donde curiosamente trabajaba la querida de Antonio Lugo Morales. ¿Qué coincidencia no les parece?

En este sentido, las cosas son más claras que el agua, Antonio Lugo es un actor nocivo para Andrés González Palomera, pero nadie se atreve a dar el primer paso para detenerlo y sacarlo del primer equipo de Andrés… Y en el escenario que viene, Fantomas les va a acarrear muchos dolores de cabeza… Y sino, al tiempo.